Puerto Príncipe, Haití.-El Consejo Presidencial de Transición de Haití se instaló ayer y de inmediato designó a Michel Patrick Boisvert como ministro interino en sustitución de Ariel Henry, quien también envió una carta de renuncia al consejo.
Michel Patrick Boisvert fue ministro de Economía y Finanzas desde el 5 de marzo de 2020 hasta ayer, como parte del Gobierno dirigido por Ariel Henry.
Ha desarrollado una larga y distinguida carrera en el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), donde trabajó durante muchos años, primero en la Oficina de Distrito de Petit-Goâve, donde nació, como director del Departamental Oeste, de 1995 a 2010.
Luego fue nombrado director de la Inspección Fiscal, cargo que ostentó de 2010 a 2018, en un contexto político cada vez más tumultuoso, llegando a la Dirección General de la institución de 2018 a 2020. Antes de iniciar su carrera en el Ministerio de Economía, Boisvert estuvo contratado en la Dirección de Estudios Económicos del Banco de la República de Haití (BRH), entre 1991 y 1995.
La instalación del Consejo de Transición supone el primer paso en el camino para superar la crisis que sufre Haití, al menos a nivel institucional, ya que la violencia de las bandas armadas no parece encontrar freno, mientras se espera la llegada de una misión multinacional autorizada por las Naciones Unidas.
El secretario de la Organización de las Naciones Unidad, António Guterres, saludó la instalación del consejo y el nombramiento del primer ministro, mientras aprovechó para llamar a todas las partes en Haití a acelerar la aplicación plena de los acuerdos transitorios, en referencia a la convocatoria de nuevas elecciones que puedan llevar a instituciones con mayor legitimidad.
Guterres también llamó al rápido despliegue de la fuerza multinacional de seguridad, autorizada por el Consejo de Seguridad y que debe dar apoyo a la Policía Nacional haitiana, una fuerza que tarda en ver la luz por problemas ante todo financieros.
Precisó que no hay novedades sobre el número de países que se muestran dispuestos a participar en esa fuerza, principalmente Kenia, Burkina Faso y varios del Caribe, pero la financiación sigue siendo baja y no ha superado el 10,6 % de lo requerido.
